La pallissa en “La casa de la masia” es una preciosa casa rural, rodeada únicamente de naturaleza. Verás que nuestro vecino más cercano está a unos 100 mts.
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Te despertarás cada mañana con unas vistas impresionantes de las montañas del Pirineo catalán y tal vez escuches los cencerros cuando estén lo suficientemente cerca. Si tienes suerte, solo escucharás el viento soplar y tal vez tu propia mente hablándote invitándote a desayunar afuera.
La pallissa tiene capacidad para 6 personas. En su interior encontrarás una cocina abierta, un acogedor salón con estufa de leña y ventanales de lado a lado que te haremos sentir como si ya estuvieras fuera. Cada día y durante todo el día podrás ver cómo cambia la escenografía a medida que las nubes se levantan o la luz del día se aleja. También encontraréis el comedor y un pequeño baño en la parte baja de la casa. Subiendo las escaleras encontrará un área de trabajo/sala de juegos, un dormitorio principal con vistas alucinantes, un segundo dormitorio con ventanas donde solo verá la naturaleza y el baño principal.
En el área exterior al lado de la casa, encontrarás una agradable y cómoda zona de descanso y comedor, donde podrás disfrutar de diferentes comidas como desayuno, brunch, almuerzo o cena, ya que encontrarás una bonita mesa y sillas de madera, un barbacoa y tumbonas donde disfrutar del momento.
Los huéspedes también podrán acceder a la zona común, donde encontrarán en el jardín junto al acantilado un increíble jacuzzi al aire libre, que se calienta con una estufa de leña. Este servicio tiene un coste extra de 100€ Te ayudaremos a girar la leña la primera vez y te mostraremos cómo funciona, para que puedas tener independencia y utilizarla como quieras hasta una hora de apertura designada.
Si estás interesado en mimarte aún más, también ofrecemos servicios de masajes privados en una habitación con increíbles vistas y ofertas gastronómicas.
¡No dudes en pedir más información sobre estos servicios!
¡Queremos que los huéspedes que nos visitan descansen de sus rutinas, estrés y tecnología y encuentren en este lugar un refugio de bienestar donde puedan regresar a sus casas sintiéndose renovados!
Aunque es nuestra propiedad privada, a veces dejamos que las vacas de nuestros vecinos entren a nuestro espacio ya que actúan como jardineros sustentables y de esta manera nos ayudamos unos a otros y construimos comunidad.